Frase de Alcides Ghiggia

El Papa, Frank Sinatra y yo, somos los únicos que hemos logrado silenciar el Maracaná con 200.000 personas dentro.... - Alcides Ghiggia

El Papa, Frank Sinatra y yo, somos los únicos que hemos logrado silenciar el Maracaná con 200.000 personas dentro.

Alcides Ghiggia

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Consulta el ojo de tu enemigo, porque es el primero que ve tus defectos. o con otra traducción:

Antístenes

Todo el mundo me esta diciendo todo el tiempo qué debo hacer.

Avril Lavigne

Nuestros fracasos son a veces más fructíferos que los éxitos.

Henry Ford

Los sindicatos no son organismos desligados de la política, toda vez que se inspiran en los principios de la lucha de clases. Y no puede ser de otro modo. Porque, ¿Quién compone los sindicatos? Los compone la clase obrera: los panaderos, los albañiles, los metalúrgicos; en una palabra, los explotados.

José Díaz Ramos

La tragedia es una herramienta para que los vivos adquiramos sabiduría.

Ken Follett

Todas mis letras han sido pedazos de poesía y los pedazos de poesía se toman de poemas que comúnmente no tiene significado en primer término.

Kurt Cobain

Damos a la gente la oportunidad de contar su historia. Facebook es una herramienta para expresarse.

Mark Zuckerberg

La distancia puede echarlo a perder todo, incluso las mejores intenciones.

Nicholas Sparks

A diferencia de mis colegas, yo no he ido a rehabilitación. Putos maricas.

Noel Gallagher

Administrador que administra y enfermo que enjuaga, algo traga.

Pablo Castellano Cardalliaguet

La belleza es la marca que Dios pone a la virtud.

Ralph Waldo Emerson

Creo que el colmo de la vida es contar lo que nos pasa, hacer la fábula florida de nuestra tragedia.

Silvio Rodríguez

Es más acertado contener a los niños por honor y ternura, que por el temor y el castigo.

Terencio

Existen bienes particulares que no dicen relación necesaria con la felicidad, ya que sin ellos uno puede ser feliz. A tales bienes no se adhiere la voluntad necesariamente.

Tomás de Aquino

Al inspeccionar un reloj, percibimos que sus diversos componentes se juntaron y encajaron con un propósito. La inferencia que hacemos es automática: que el reloj necesariamente tuvo un fabricante. Asimismo, el universo necesariamente tuvo un diseñador. Ese diseñador necesariamente fue una persona. Esa persona fue Dios.

William Paley