De los resistentes es la última palabra.
Albert Camus
Llamamos peligrosos a los que poseen un espíritu contrario al nuestro, e inmorales a los que no profesan nuestra moral.
Anatole France
Lo único importante es la conversación para obtener una cosa de otro, es tenacidad, voluntad y hablar, machacar. Siempre sucumbe el más débil.
André Maurois
Añade el hombre conocimientos a conocimientos: nunca el saber es bastante. Si tanto es uno más hombre cuanto más sabe, el más noble empleo será el aprender.
Baltasar Gracián
Si amas al dinero a lo sumo llegarás a un banco, pero si amas a la vida, seguramente llegarás a Dios.
Facundo Cabral
La verdadera educación no sólo consiste en enseñar a pensar sino también en aprender a pensar sobre lo que se piensa y este momento reflexivo -el que con mayor nitidez marca nuestro salto evolutivo respecto a otras especies- exige constatar nuestra pertenencia a una comunidad de criaturas pensantes.
Fernando Savater
No todo resbalón significa una caída.
George Herbert
Si no logras desarrollar toda tu inteligencia, siempre te queda la opción de hacerte político.
Gilbert Keith Chesterton
¿No es obvio que el pasado comienza hace un instante? El pasado muerto es sólo otro modo de designar el presente vivo.
Isaac Asimov
¿Tenemos mucho tiempo libre para vivirnos, o pedimos constantemente que nos vivan? ¡no hemos aprendido a vivir!
José Luis Sampedro
En ninguna parte puede encontrar el hombre un retiro más tránquilo y menos agitado que en su propia alma.
Marco Aurelio
Hierve todo. Mientras se vive todo hierve.
Mario Tobino
Las discusiones son completamente vulgares, porque en la buena sociedad todo el mundo tiene exactamente las mismas opiniones.
Oscar Wilde
Que el decir es fácil uno que se ausenta, mas no el ausentarse, si hay quien lo detenga.
Pedro Calderón de la Barca
Basta que exista un solo hombre justo para que el Mundo merezca haber sido creado.
Talmud
La desconfianza en nosotros mismos es un enemigo traidor que nos priva de hacer muchas cosas buenas, sin más razón que la de no resolvernos e intentarlas.
William Shakespeare
