Frase de Alexander Pope

← Anterior Siguiente →

Debe enseñarse a los hombres como si no se les enseñara. Las cosas desconocidas deben proponérseles como cosas olvidadas.... - Alexander Pope

Debe enseñarse a los hombres como si no se les enseñara. Las cosas desconocidas deben proponérseles como cosas olvidadas.

Todas las frases de Alexander Pope →

Explorar Frases

El libro esta terminado cuando no te quiere más.

António Lobo Antunes

La muerte no es lo que creemos normalmente. La muerte es deshacerse del cuerpo físico mientras el almainmortal avanza y pasa al otro lado. En ese sentido no hay muerte, sólo vida y amor. La luz es una manifestación más de ese amor universal, eterno, que todo lo abarca.

Me queda media cerveza en el bar que no va a discutir conmigo.

Es solo que a veces me abruma darme cuenta de cuánto te quiero.

Nosotros utilizamos los sonidos con el fin de hacer música, como usamos las palabras con el fin de crear el lenguaje.

Frédéric Chopin

Ese beso que a tiempo me pediste temblando esta noche en mis labios es granada en sazón.

No se puede depurar la administración distrital a menos que los campesinos se alcen.

Nada graba tan fijamente en nuestra memoria alguna cosa como el deseo de olvidarla.

Fuera lucía ese cielo resplandeciente tan característico de Estambul en los días de primavera. En las calles el calor hacía sudar a los estambulíes, que aún no se habían librado de los hábitos del invierno, pero en el interior de las casas, en las tiendas y a la sombra de los tilos y los castaños seguía haciendo fresco.

No digas de antemano lo que vas a hacer; porque si fallas, se burlarán de ti.

Pítaco de Mitilene

Cuando éramos pequeños a algunos amigos les gustaba el baloncesto, a otros el basket...

Si no puedes ser fuerte, y sin embargo no puedes ser débil, eso resultará en tu derrota.

El amor es un intento de cambiar un pedazo de un mundo de ensueño por una realidad.

La desigualdad no sólo es poco atractiva en sí misma; está claro que se corresponde con problemas sociales patológicos que no podemos abordar si no atendemos a su causa subyacente.

La libertad de amar no es menos sagrada que la libertad de pensar. Lo que hoy se llama adulterio, antaño se llamó heregía.

Explorar Autores

Otto René Castillo Madame de Courcelles Albertine Necker de Saussure Vittorio Alfieri Mika Waltari Peter Joseph Steve Carrell Giovanni Gentile Barbara Berckhan The Rock