Frase de Beatriz Villacañas

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Ahora apareces, resucitada tú entre todas las muñecas, con vestido de alma, a poblar mi jardín de niños muertos que juegan con la... - Beatriz Villacañas

Ahora apareces, resucitada tú entre todas las muñecas, con vestido de alma, a poblar mi jardín de niños muertos que juegan con la noche al escondite.

Beatriz Villacañas

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Ha sido durante mucho tiempo mi axioma que las pequeñas cosas son infinitamente lo más importante.

Arthur Conan Doyle

Lo que hace falta es decir la verdad, no hablar de más.

Demócrito

¿Quién es el que dice: El caso es que yo tengo tan poco sentido común? Y es que cada cual ha de juzgar el sentido común de los otros por el suyo propio, con una falta de sentido endocrítico que bien requiere un rato de meditación de cada uno para consigo mismo.

Eduardo Torroja Miret

Corté la naranja en dos, y las dos partes no podían quedar iguales. ¿Para cuál fui injusto -yo, que las voy a comer a ambas?

Fernando Pessoa

¿En qué hondonada esconderé mi alma para que no vea tu ausencia que como un sol terrible, sin ocaso, brilla definitiva y despiadada?

Jorge Luis Borges

Toda mirada era un festejo de sol, de estar de abismo iluminado.

José Barroeta

No valen antifaces en los países de prensa libre, que sale cada mañana, como un viento duende, levantando caretas.

José Martí

Mi definición de creatividad es: El proceso de tener ideas originales que tengan valor.

Ken Robinson

Jamás busques la respuesta en los lugares que no existen.

Proverbio Chino

Ya todo el año me hace daño y me vuelvo a llevar a patadas con la primavera.

Roberto Iniesta

Si el alma es la enferma, lo mismo da que se encuentre rodeada de riquezas o en la pobreza, porque su mal la seguirá a todas partes.

Séneca

Las gentes propensas a la melancolía son las mejores dotadas para el amor.

Stendhal

Sé flexible como un junco, no tieso como un ciprés.

Talmud

Creo, sinceramente, como tú, que los sistemas bancarios son más peligrosos que los ejércitos.

Thomas Jefferson

La prueba de toda verdad reside, sencillamente, en su eficacia.

William James