Frase de Christian Bale

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Porque a veces la verdad no es suficiente. A veces la gente se merece algo más. A veces la gente se merece una recompensa por tener f... - Christian Bale

Porque a veces la verdad no es suficiente. A veces la gente se merece algo más. A veces la gente se merece una recompensa por tener fe.

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El pueblo de los países en desarrollo tiene derecho de gozar los beneficios de una civilización evolucionada, de mejores alimentos, vestimentas, educación y entretenimientos, pero los que estamos en el mundo desarrollado no hemos hecho lo suficiente para ayudarlos.

Joroba de dromedario.

Alfonso Lanzagorta

Saber demasiado es envejecer prematuramente.

Dormido para el peligro, despierto para la pasta, siempre igual.

Terminado, el libro empieza.

Evie dice que los que son guapos no deben salir juntos. Que juntos no llaman la atención lo suficiente. Dice que cuando están juntos se produce un cambio total en los patrones de belleza. Dice que eso se nota. Que cuando los dos son guapos, ninguno lo es. Juntos, como pareja, son menos que la suma de sus respectivas partes.

Chuck Palahniuk

Todas las desgracias del mundo provienen del olvido y el desprecio que hasta hoy se ha hecho de los derechos naturales e imprescindibles del ser mujer.

No estoy sufriendo, estoy luchando. Luchado por formar parte de las cosas, por seguir en contacto con quien fui en otro tiempo.

En Silicon Valley hay una gran cantidad de dinero disponible y mucha gente alentando a los demas a tomar riesgos. No se que hubieramos hecho si hubieramos estado en un entorno diferente.

Cuanto más feroces son los varones, mayor es el número de guerras emprendidas y mayor la necesidad de los mismos.

Todos los hombres golpean a sus mujeres: la gente del pueblo, con sus puños; los burgueses, con las leyes.

Júzgate dichoso cuando puedas vivir a la vista de todo el mundo.

Cuando los cerezos florecen las aves tienen dos patas Y los caballos cuatro.

Ueshima Onitsura

La mujer es variable y tornadiza.

No me extrañaría, que la avidez de las mujeres por oir fuese un resultado natural de la avidez de los hombres por hablar.

William Dean Howells

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