Frase de Dave Barry

← Anterior Siguiente →
Aunque el golf antes estaba restringido a protestantes ricos y gordos, ahora está abierto a cualquiera con un atuendo horrible.... - Dave Barry

Aunque el golf antes estaba restringido a protestantes ricos y gordos, ahora está abierto a cualquiera con un atuendo horrible.

Dave Barry

Todas las frases de Dave Barry →

Explorar Frases

La gente nunca está convencida de tus razones, de tu sinceridad, de tu seriedad o tus sufrimientos, salvo sí te mueres.

Albert Camus

La virtud y la inteligencia pertenecen a los seres humanos como individuos que asocian libremente con otros individuos en pequeños grupos. Otro tanto sucede con el pecado y la estupidez.

Aldous Huxley

Siempre he creído, y sigo creyendo, que la imaginación y la fantasía son muy importantes, puesto que forman parte indisoluble de la realidad de nuestra vida.

Ana María Matute

... las cosas indemostrables, que constituyen la máxima parte de la Escritura,...

Baruch Spinoza

El que tiene suerte, encuentra en el yerno un hijo; el que no la tiene, pierde una hija.

Epicteto

Gide dice que el infierno de esta vida es tener que elegir entre un centenar de caminos sólo uno, y vivir sin nostalgia de los otros noventa y nueve.

Fernando Sabino

Desconocer nuestras raíces, separarnos de ellas, constituye el gesto suicida de un idiota.

François Mitterrand

La indignación es el privilegio de los chandalas; e igualmente el pesimismo.

Friedrich Nietzsche

Todo por Dios y sólo por Dios.

Jerónimo Usera

La muerte unas veces nos deja morir y otras nos asesina.

Manuel González Prada

Se trata de un simple hecho de que todos usemos las técnicas de actuación para alcanzar cualquier fin que buscamos.

Marlon Brando

El jugador es un ladrón de su fortuna, de su tiempo, de su libertad y de su salud.

Nathaniel Cotton

Y nada podrá contra la vida porque nada pudo jamás contra la vida.

Otto René Castillo

El Álgebra no es más que Geometría y la Geometría no es más que Álgebra abstracta.

Sophie Germain

Una vez me preguntó algo sobre un tal Mozart, y por un momento me quedé parado. Y eso que me suena ese nombre...

Woody Allen