Frase de Elías Nandino

Un día la voz de la conciencia me laceraba tanto que, desperado, me coloqué frente al espejo y discutí... (Salí absuelto y los dos ter... - Elías Nandino

Un día la voz de la conciencia me laceraba tanto que, desperado, me coloqué frente al espejo y discutí... (Salí absuelto y los dos terminamos llorando...)

Elías Nandino

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