Frase de Ernesto Mallo

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Déjeme decirle, a riesgo de parecer ridículo, que el verdadero guerrillero está guiado por profundos sentimientos de amor.... - Ernesto Mallo

Déjeme decirle, a riesgo de parecer ridículo, que el verdadero guerrillero está guiado por profundos sentimientos de amor.

Ernesto Mallo

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Explorar Frases

Cree que no es correcto traer a un niño a este mundo. Quiere matar a nuestro bebé.

Amanda Seyfried

Rechazo a todo el mundo, no es algo personal. Es más sencillo.

Anna Kendrick

En la vida hay dos caminos: Uno el que buscas y otro el que te encuentras. El que te encuentras son interrogantes, y el que buscas son respuestas.

Anónimo

Las personas grandes son bien extrañas.

Antoine de Saint-Exupéry

Los hombres dotados de una inferior naturaleza repugnan el castigo que merecieron; los de temple mediocre se resignan a él; los de temple superior lo reclaman.

Arturo Graf

La vida es ciervo herido sin remedio, que las flechas le dan veneno y alas.

Concha Méndez

No se te ocurra construir tu vida sobre la mentira y el silencio. Es lo peor, te lo aseguro.

Fernando Aramburu

Mejor se puede disculpar el que se muere de miedo, que el que de miedo se mata: porque allí obra sin culpa la naturaleza; y en éste, con delito y culpa, el discurso apocado y vil.

Francisco de Quevedo

Todo es demasiado caro cuando no se necesita.

James Joyce

Ayer hecha un pingajo me dijo en el tigre de un bar.

Joaquín Sabina

Así como entre las personas decentes no se deja vivir a los ladrones, entre los ladrones no es posible ser persona decente, y terminé robando tanto y tan limpiamente como mis camaradas veteranos.

Manuel Chaves Nogales

Tomar buenas decisiones es una habilidad crucial en todos los niveles.

Peter F. Drucker

Tengo prisa ya por verte, por tenerte entre mis brazos, porque cuando tu estás lejos no me late el corazón.

Ramón Melendi

Los dos somos relojes y sólo contamos en el tiempo, el filo aguzado de la manecilla presiona contra el porvenir.

Robert Lowell

En un minuto puedo cambiar mi actitud, y en ese minuto puedo cambiar el día entero.

Spencer Johnson