Sólo la renovación puede mantener, el que se queda parado, se retrasa.
Everhardus Johannes Potgieter
El acto autoritario se distingue de todos los demás por el hecho de que no encuentra oposición por parte de quien, o de quienes, es el destinatario. Lo que presupone por una parte, la posibilidad de una oposición y, por la otra, la renuncia consciente y voluntaria a la realización de esa posibilidad.
Alexandre Kojève
Todo arte y todo método, y del mismo modo toda acción y elección, parecen tender a algún bien: por eso se ha dicho, con razón, que el bien es aquello a que todas las cosas tienden.
Aristóteles
El hombre no puede sobrevivir, salvo mediante su propia mente. Llega desarmado a la Tierra. Su cerebro es su única arma.
Ayn Rand
Una victoria es mejor que un millón de dólares.
Ayrton Senna
Juego honestamente y juego para ganar. Si pierdo, sufro las consecuencias.
Bobby Fischer
Nada se odia con más intensos bríos que aquello a que uno se parece y uno llega a aborrecer el parecido.
Camilo José Cela
Aunque italiano de nacimiento, soy un arquitecto argentino, que vive y proyecta en Argentina sin perder los lazos con la tierra de mi padre.
Clorindo Testa
El amor no lo es todo.
Gayle Forman
La Estrella Polar. ¿La ves? Es la estrella más importante del cielo. Si alguna vez te pierdes, te ayudará a encontrar tu camino.
George Clooney
El oro, a la par que es el más puro de los metales, es el mayor de los corruptores.
Joseph Sanial-Dubay
Creo que el problema de Hollywood es subestimar la inteligencia y la integridad del público.
Matthew Davis
Gasto mis días, arruino mis noches.
Mucho Muchacho
Porque no creo que pueda hacerse mayor ultraje a la naturaleza humana, cualesquiera que sean las faltas del individuo, como impedirle que oculte el rostro por un sentimiento de vergüenza, haciendo de esa imposibilidad la esencia del castigo.
Nathaniel Hawthorne
Háblame más... y más. Que tus acentos me saquen de este abismo; el día en que no salga de mí mismo, se me van a comer los pensamientos.
Ramón de Campoamor
Puedes juzgar a los demás cuando te conozcas a ti mismo. Ahora dime: ¿Quién entre nosotros es culpable y cuál inocente?
Yibrán Jalil Yibrán
