Frase de Fernand Braudel

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No se puede negar, por el contrario, que el aguardiente, el ron y el alcohol de caña fueron los regalos envenenados de Europa a las... - Fernand Braudel

No se puede negar, por el contrario, que el aguardiente, el ron y el alcohol de caña fueron los regalos envenenados de Europa a las civilizaciones de América.

Fernand Braudel

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La tarea del director es dar su estilo. Los numerosos detalles artísticos nacen a través de su iniciativa.

Carl Theodor Dreyer

El golpe esperado resulta menos duro.

Catón

Es el amor que da en lugar de recibir, el amor que se empequeñece en vez de ocupar todo el espacio, el amor que desea el bien del otro antes que el suyo propio, el amor liberado del ego.

Emmanuel Carrère

Dícese que los regalos persuaden aun a los dioses.

Eurípides

Dios provee a cada pájaro con un alimento, pero no se lo hecha en el nido.

George Herbert

La cosa más práctica e importante en un hombre es su concepto del Universo.

Gilbert Keith Chesterton

La felicidad está hecha de una sustancia tan liviana que fácilmente se disuelve en el recuerdo, y si regresa a la memoria lo hace con un sentimiento empalagoso que la contamina y que siempre he rechazado por inútil, por dulzón, y en últimas por dañino para vivir el presente: la nostalgia.

Héctor Abad Faciolince

Si conservas tu rostro dirigido al sol, nunca verás las sombras.

Helen Keller

El amor lo vence todo... excepto a la pobreza y al dolor de muelas.

Mae West

El crecimiento no es lo mismo que el desarrollo y el desarrollo no precisa necesariamente de crecimiento.

Manfred Max-Neef

Ya no queda lugar para brujos ni para chamanes. A no ser la política.

Mario Bunge

Toda hora perdida en la juventud es una probabilidad de desgracia en el porvenir.

Marlene Dietrich

Jesús mismo, y la mayor parte del mensaje de los Evangelios, es un mensaje de servicio a los pobres, una crítica de los ricos y los poderosos, y una doctrina pacifista. Y se mantuvo así, asi es como el cristianismo estaba... hasta Constantino.

Noam Chomsky

A mí dadme las cosas superfluas, que cualquiera puede tener las necesarias.

Oscar Wilde

No puedo concentrarme mientras pienso.

Yogi Berra