Frase de Friedrich Nietzsche

← Anterior Siguiente →
Dos cosas anhela el hombre de verdad: el peligro y el juego, por eso quiere a la mujer, que es el juguete más peligroso.... - Friedrich Nietzsche

Dos cosas anhela el hombre de verdad: el peligro y el juego, por eso quiere a la mujer, que es el juguete más peligroso.

Friedrich Nietzsche

Todas las frases de Friedrich Nietzsche →

Explorar Frases

Una de las ventajas de ser desordenado es que uno constantemente hace descubrimientos emocionantes.

Alan Alexander Milne

Temed a la tecnología, se acerca la destrucción del hombre.

Alex Pimentel

Filosofía: Camino de muchos ramales que conduce de ninguna parte a la nada.

Ambrose Bierce

La lengua es como un cuchillo afilado, mata sin extraer sangre.

Buda Gautama

No es algo malo que los niños, ocasionalmente y en forma cortés, pongan en su lugar a sus padres.

Colette

Para mí, los mejores y más caros productos de la civilización han sido siempre -y lo siguen siendo- un libro bien escrito, en cuyas páginas haya algún pensamiento nuevo, y una pluma bien tajada con la que poder comunicar a los demás los míos propios.

León Trotski

Cuando uno empieza a hacer referencia, de manera personal, a hechos que son de todos, que son colectivos, adquiere una singularidad a lo que va a pasar que yo no quiero atribuirme. Soy una parte más de los que participamos mañana y, lo que sientan los otros, es lo que voy a sentir yo.

Marcelo Bielsa

Chaplin es un hombre cuyo talento es para sorprenderse. En primer lugar, la comedia es su patio trasero. Es un genio, un genio del cine. Un talento para la comedia sin igual.

Marlon Brando

Si me pagara lo que gasta para evitar que le roben, yo no le robaría.

Paul Newman

La hermandad basada en la igualdad es la meta suprema de la sociedad humana.

Ramana Maharshi

La tortícolis del ahorcado es incurable.

Ramón Gómez de la Serna

Los indígenas estamos dispuestos a combinar tradición con modernidad, pero no a cualquier precio.

Rigoberta Menchú

Amad la justicia los que gobernaís la Tierra.

Salomón

A la más perfecta de las dictaduras, preferiré siempre una imperfecta democracia.

Sandro Pertini

Tú eliges tus propios amos y eres víctima de tu propio invento.

Walter Riso