Frase de Gaspar Melchor de Jovellanos

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Busco en estas moradas silenciosas el reposo y la paz que aquí se esconden, y sólo encuentro la inquietud funesta que m... - Gaspar Melchor de Jovellanos

Busco en estas moradas silenciosas el reposo y la paz que aquí se esconden, y sólo encuentro la inquietud funesta que mis sentidos y razón conturba...

Gaspar Melchor de Jovellanos

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Explorar Frases

El secreto de mi felicidad está en no esforzarse por el placer, sino en encontrar el placer en el esfuerzo.

André Gide

Me creo en el infierno, luego estoy allí.

Arthur Rimbaud

Para mucha gente el blues es algo sagrado y, cuando me encuentro con alguien que no lo entiende así, no descanso hasta convencerle.

B.B. King

¡Ella no es una espía!

Brad Pitt

Calibra las iniciativas de tú rival, haz que falle y metete en sus golpes, inclinándote, esquivando o fintando con manos que controlen.

Bruce Lee

Es simpleza o necedad llorar por lo que con llorar no se puede remediar.

Fernando de Rojas

Siempre dispuesto a darte algo màs aunque luego no lo pueda dar y con sigo llevar siempre la verdad, nada se esconde nada que ocultar, para un amigo amigo de verdad.

Fraco De Vita

En el camino me puse a reflexionar sobre las máximas que acababa de oír, no concibiendo para las virtudes una base más sólida que el pundonor, el cual, a mi juicio, las abarcaba todas.

Jan Potocki

Escribo no para enseñar, sino para instruirme.

Jean Dolent

En la conducta humana reina la libertad, hasta el punto de poder obrar sin ganas y en contra de las ganas.

José Ramón Ayllón

Hay momentos en que lo mejor es que una persona se contente con lo que ya tiene, no sea que lo vaya a perder todo.

José Saramago

Herir con un mismo golpe al inocente y al culpado, obra es de la demencia o la barbarie.

Manuel Tamayo y Baus

Los malos parecen siempre muchos por el ruido que hacen.

Manuel Tamayo y Baus

El famoso Juicio Final lo llevamos aquí, en el pecho.

Mario Benedetti

Empleo las palabras que me has enseñado. Si no significan nada, enséñame otras. O deja que me calle.

Samuel Beckett