Frase de Gonzalo Escudero

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¡Hombre de América! Hombre torrente y cataclismo, con una mordedura de llamas en el pecho. ¡Naciste de una piedra que rodaba al abi... - Gonzalo Escudero

¡Hombre de América! Hombre torrente y cataclismo, con una mordedura de llamas en el pecho. ¡Naciste de una piedra que rodaba al abismo y eres un ventisquero con dos garras de helecho!

Gonzalo Escudero

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Explorar Frases

Muero debido a la ayuda de demasiados médicos.

Alberto Magno

Dos extremos: excluir la razón y no admitir más que la razón.

Blaise Pascal

¿Qué es esa cosa llamada amor? ¿Esa cosa divertida llamada amor? Que solo puede resolver este misterio ¿Por qué he de ser un tonto?

Cole Porter

El pasado es una colección interminable de horrores que sólo merece el más completo de los olvidos; el futuro, una incógnita poco confiable que es preciso asegurar; el presente, el campo de batalla donde hay que garantizarse la vejez.

Ernesto Mallo

Podría decir cosas interesantes si dijera lo contrario de lo que piensa.

Fernando Arrabal

El nivel de civilización a que han llegado diversas sociedades humanas está en proporción a la independencia de que gozan las mujeres.

Flora Tristan

Sin tener qué decir, pero profundamente destrozado, mi espíritu vacío llora su desventura de ser un soplo negro para las rosas blancas, de ser un agujero por donde se destruye la risa del amor, cuyos dos labios son la mujer y el hombre.

Gonzalo Rojas

La manera más segura de lograr algo en esta vida es estar preparado para prescindir de ella.

Jane Welsh Carlyle

Todo hombre lo bastante inteligente y generoso para aportar a la empresa su esfuerzo, por pequeño e insignificante que sea, obtendrá de la lucha misma un noble goce que no estará dispuesto a vender por ningún placer egoísta.

John Stuart Mill

La fascinación por la belleza destructora, la caprichosa crueldad de la mujer amada.

Junichiro Tanizaki

Me gustaría deshacerme de las ilusiones. A mí lo que me fascina es tratar de acercarme a lo real, pero no sabemos nada. Y hoy vivo entre el aburrimiento y la vergüenza de pertenecer a un género animal como el ser humano. Por eso me gustaría ser un elefante, pero salvaje, no dejarme de nadie; aunque la tortura continúa, dentro de la poca libertad que logré.

Leonora Carrington

Un antiguo (no se quién), deseaba tener el cuello tan largo como una grulla, para saborear más tiempo lo que tragaba.

Michel de Montaigne

Mejor es la salud que nunca se perdió.

Séneca

El mar es un amigo de las mil caras, nunca aburridas, nunca repetitivas, nunca iguales.

Susanna Agnelli

No debemos dejar de explorar. Y al final de nuestras exploraciones llegaremos al lugar del que partimos, y lo conoceremos por primera vez.

T. S. Eliot