Frase de James Thurber

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Vosotros taláis los árboles para construir edificios que albergarán a los hombres que se han vuelto locos por no haber podido ver los... - James Thurber

Vosotros taláis los árboles para construir edificios que albergarán a los hombres que se han vuelto locos por no haber podido ver los árboles.

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Todo lo que en el siglo pasado era materia se ha vuelto sistema (el átomo, la molécula, el astro), todo lo que era sustancia viviente se ha convertido en sistema; todo lo social ha sido concebido siempre como sistema, la noción de sistema ha sido siempre una noción zócalo para designar todo conjunto de relaciones entre constituyentes que forman un todo.

No era como 'Tienes que tener paz!' Sólo dale una oportunidad. ¿No estamos haciendo ningún himno aquí?. Sólo digo que tal una canción para el cambio. Creemos que tenemos el derecho a tener voz y voto en el futuro y creemos que el futuro se hace en tu mente.

No es necesario que haya amor en un libro para que nos encante, pero sí es necesario que haya mucha ternura.

Los amigos son los peores enemigos.

¿Volver? Vuelva el que tenga, tras largos años, tras un largo viaje, cansancio del camino y la codicia, de su tierra, su casa, sus amigos, del amor que al regreso fiel le espere.

El cuidado prestado por los padres a los hijos puede aumentar el crecimiento emocional y los valores morales y psicológicos del hombre.

¡Dicen que a veces uno se ahoga en el desengaño.

Murasaki Shikibu

Un cigarrillo es el arquetipo de un placer perfecto. Es exquisito y deja insatisfecho. ¿Qué más puede pedirse?

Su Majestad es una señorita muy linda, pero no tiene mucho que decir.

Hay quien se extraña de que por lo común los ricos sean avaros. Y, sin embargo, si no hubieran sido avaros cuando eran pobres, no hubieran llegado a ricos. El procedimiento que conserva es el mismo que cría. Para encontrar generosidad es preciso dirigirse a los pobres consuetudinarios o a los salteadores de caminos.

Y ahí voy, a romper las telarañas de tu corazón.

Roberto Iniesta

Eres tan joven como tu confianza en ti mismo, tan viejo como tus temores.

Ajeno es todo lo que nos viene en deseo.

Aquella mañana, la curva del horizonte iba hacia abajo, pero te aseguro que la de mis labios iba firmemente hacia arriba, esbozando una sonrisa.

No hay nada más fascinante que la política.

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