Frase de Joël Dicker

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Hoy en día, consideramos estrellas a personas que no hacen nada y que solo se dedican a hacerse fotos a sí mismas o al plato que tienen... - Joël Dicker

Hoy en día, consideramos estrellas a personas que no hacen nada y que solo se dedican a hacerse fotos a sí mismas o al plato que tienen enfrente.

Joël Dicker

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Entre los argentinos es muy popular la idea de que el mundo viva en una paz duradera. Por eso acogieron con tanto afecto y calor a los ajedrecistas soviéticos, porque vieron en ellos a emisarios de la paz que les llevaban las aspiraciones antibélicas del gran pueblo soviético.

Aleksandr Kótov

Si las leyes divinas y de la burguesía nos separan que sea el amor a la libertad que nos una.

Alex Pimentel

Cuídese del matrimonio.

Anónimo

Los aduladores son como ladrones; su primer cuidado consiste en apagar la luz.

Cardenal Richelieu

Tenemos que vivir, por muchos que sean los cielos que hayan caído sobre nosotros.

D. H. Lawrence

Yo recupere mi respeto cuando estreche las manos contigo en el No Mercy. Todo es divertido hasta que te atrape. Estaré bien.

Eddie Guerrero

Hemos convertido las máquinas en dioses, y nos hemos vuelto divinos sirviendo a las máquinas.

Erich Fromm

A las veces pierde é cuyda que gana quien bien callar troca por mucho dezir.

Fernán Pérez de Guzmán

Ser virtuoso es tener el razonable conocimiento de lo que es una buena vida.

Fernando Savater

Y mi alma de tahúr lo puso al doble o nada.

Joaquín Sabina

El que tenga corazón gastado en falsos amores búsquese una novia en flores y hallará su salvación.

Luis Cané

Mi posición es que los seres humanos están calentando y envenenando el planeta y tenemos, para con la biosfera, para con todos los animales y plantas que están siendo aniquilados y para con las futuras generaciones de seres humanos, la obligación moral de impedir que estos cambios catastróficos se produzcan.

Michael Crichton

Seguiré compitiendo mientras sienta placer en hacerlo. Cuanto más corro más me gusta este deporte.

Michael Schumacher

Dicen que me arrastrarán por sobre rocas cuando la Revolución se venga abajo, que machacarán mis manos y mi boca, que me arrancarán los ojos y el badajo. Será que la necedad parió conmigo, la necedad de lo que hoy resulta necio: la necedad de asumir al enemigo, la necedad de vivir sin tener precio.

Silvio Rodríguez

Un hombre no tiene por qué avergonzarse de tener un mono por abuelo. Si hubiera un antepasado del que debería sentir vergüenza al recordarlo sería más bien un hombre que no se conforma con un éxito equívoco en su propia esfera de actividad, se sumerge en cuestiones científicas de las que no tiene conocimiento real, sólo para ocultarlos con una retórica sin sentido, y distraer la atención de sus oyentes del tema en cuestión mediante digresiones elocuentes y apelaciones calificadas a prejuicios religiosos.

Thomas Henry Huxley