Frase de José Saramago

La carne es extremadamente débil, y no tanto por su culpa, pues el espíritu, cuyo deber, en un principio, sería levantar una barrera c... - José Saramago

La carne es extremadamente débil, y no tanto por su culpa, pues el espíritu, cuyo deber, en un principio, sería levantar una barrera contra todas las tentaciones, es siempre el primero en ceder, en izar la bandera blanca de la rendición.

José Saramago

Todas las frases de José Saramago →

Explorar Frases