Frase de Karl Kraus

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Las instituciones humanas deben volverse tan perfectas que podamos pensar sin que nos disturbe cuán imperfectas son las divinas.... - Karl Kraus

Las instituciones humanas deben volverse tan perfectas que podamos pensar sin que nos disturbe cuán imperfectas son las divinas.

Karl Kraus

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Explorar Frases

Antes de volver a entrevistarme con Franco prefiero que me arranquen las muelas.

Adolf Hitler

Sin el tiempo, esa invención de Satanás, el mundo perdería la angustia de la espera y el consuelo de la esperanza.

Antonio Machado

Pero se sigue adoctrinando sistemáticamente en la enseñanza de la historia para lo cual los réprobos son los que defendían la soberanía y los próceres los que la traicionaban para fines institucionales.

Arturo Jauretche

Sólo conozco dos tipos de personas razonables: las que aman a Dios de todo corazón porque le conocen, y las que le buscan de todo corazón porque no le conocen.

Blaise Pascal

Ser feliz. Es una forma de ser sabio.

Colette

Como Dios, el capitalismo tiene la mejor opinión sobre sí mismo, y no duda de su propia eternidad.

Eduardo Galeano

Sólo somos el muro que retiene el jardín.

Eduardo Lizalde

Mezcla a tu prudencia un grano de locura.

Horacio

La gente que experimenta una zozobra porque da más de lo que recibe, quiere que haya equidad.

John C. Maxwell

No podemos tener ningún progreso sin cambios.

John Wooden

Envidio a la gente que bebe. Al menos ellos tienen a qué echar la culpa de todo.

Oscar Levant

La mujer es casi siempre realista, optimista y social: lo que hacen los demás tiene mucha fuerza para ella, y el camino solitario del inadaptado no le seduce.

Pío Baroja

En toda sociedad de clases, la cultura intelectual (arte y ciencia) es una creación de la clase dominante; y el objetivo de esta cultura es en parte asegurar la satisfacción directa de las necesidades del proceso social, y en parte satisfacer las necesidades intelectuales de la clase gobernante.

Rosa Luxemburgo

En las fortunas modestas, los peligros son menores.

Tácito

No hay guerrero, por bien armado que esté, al que no pueda encontrársele el lado flaco.

Voltaire