Un mundo, un elenco, una ruta de acceso.
Kuvempu
Camarlengo... ¿no os suena a nombre de tapa? ¡Tenemos chocos, bravas y camarlengo a la plancha!
Andreu Buenafuente
Sin la ayuda de objetos que podamos ver o tocar, olvidamos fácilmente aquello que no queremos recordar.
Camilla Läckberg
- Por favor, tengo mujer e hijos. - Bueno, sea tierno con ellos. En especial con su esposa, mi marido no fue tierno conmigo y ya ve cómo terminé.
Geena Davis
Contigo, Jesús, ¡qué placentero es el dolor y qué luminosa la oscuridad!
Josemaría Escrivá de Balaguer
Los que piensan por sí mismos molestan mucho.
Juan Gómez-Jurado
A mis hijos no les voy a dejar los trastos hasta que me muera. Nunca voy a dejar de cantar porque yo cada día canto mejor.
Julio Iglesias
La razón debe conocer la razón del corazón y todas las demás razones.
Leonora Carrington
Sobre Coldplay: Chris Martin parece un profesor de geografía. ¿Qué es todo eso de escribir mensajes sobre el Libre Comercio? Si quiere escribir sobre esa mierda le daré un bolígrafo y algunos folios. Panda de estudiantes.
Liam Gallagher
El peor de todos los despotismos, es el gobierno militar.
Maximilien Robespierre
Cuando la concentración impregna la mente y el cuerpo, el poder de la respiración se vuelve uno con el universo, extendiéndose suave y naturalmente hasta el límite absoluto, pero, a la vez, la persona se hace cada vez más autocontenida e independiente.
Morihei Ueshiba
Ninguna otra publicación mía ha provocado un entusiasmo tan grande o tan violenta hostilidad.
Oscar Cullmann
Servid cien veces, negaos una, y nadie se acordará más que de vuestra negativa.
Plinio
La Contra -Nicaragüense- es el equivalente moral de nuestros Padres Fundadores.
Ronald Reagan
La miré un buen rato. Estaba dormida con la cabeza apoyada en la almohada y tenía la boca abierta. Tiene gracia. Los mayores resultan horribles cuando duermen así, pero los niños no. A los niños da gusto verlos dormidos. Aunque tengan la almohada llena de saliva no importa nada.
Salinger
La única manera sensata y religiosa de contemplar la muerte es considerarla y sentirla como parte integrante, como la sagrada condición sine qua non de la vida, y no separarla de ella mediante alguna entelequia.
Thomas Mann
