Frase de Lee Iacocca

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A veces hasta el mejor gerente es como aquel niño que pasea un perro grande y espera a ver dónde quiere ir el animal para entonces lleva... - Lee Iacocca

A veces hasta el mejor gerente es como aquel niño que pasea un perro grande y espera a ver dónde quiere ir el animal para entonces llevarlo allá.

Lee Iacocca

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En muchos casos, al profesional de Bolsa le está prohibido volver la vista para mirar las antiguas cotizaciones: podría pasarle como a la mujer de Lot.

André Kostolany

La lógica es el arte de estar equivocado con confianza y seguridad.

Anónimo

Sin valor es estéril la sabiduría.

Baltasar Gracián

No hay que confundir el estado natural con él estado de religión, sino que hay que concebirlo sin religión ni ley, y por lo mismo sin pecado ni injuria.

Baruch Spinoza

El punto más importante es no tener cualquier postura preparada o movimientos preparatorias antes de lanzar el directo o cualquier puñetazo.

Bruce Lee

Dios creó al gato para que el hombre pudiera acariciar al león.

Charles Baudelaire

Cuando tengas entre 40 70 % de la información sigue tus instintos. No esperes a tener suficientes hechos para estar 100% seguro porque para ese entonces quizás sea demasiado tarde.

Colin Powell

El que no haya un botón de borrar en Internet obliga a adoptar políticas públicas que antes nunca habíamos imaginado.

Eric Schmidt

Somos tan pequeños como nuestra dicha, pero somos tan grandes como nuestro dolor.

Friedrich Hebbel

Ramón Mendoza Fontela: el mandamal del pelo blanco.

José María García

Un libro que no merece una segunda lectura, no merece que se lea ni una sola vez.

Karl Jacob Weber

No sé si se me entiende. Lo que quiero decir es otra cosa.

Nicanor Parra

Los errores más serios son los que se cometen como resultados de respuestas incorrectas. El verdadero peligro es hacerse las preguntas incorrectas.

Peter F. Drucker

A quien amigos tiene por millones ninguno sobrará; el que tan sólo un enemigo cuenta por doquier lo encontrará.

Ralph Waldo Emerson

¡Cuántas injusticias y maldades se cometen por mero hábito!

Terencio