Frase de Ludwig van Beethoven

← Anterior Siguiente →
Para ti, pobre Beethoven, no hay felicidad en el mundo, tienes que crearla en ti mismo. Solamente en las regiones del ideal pue... - Ludwig van Beethoven

Para ti, pobre Beethoven, no hay felicidad en el mundo, tienes que crearla en ti mismo. Solamente en las regiones del ideal puedes hallar amigos.

Ludwig van Beethoven

Todas las frases de Ludwig van Beethoven →

Explorar Frases

Porque son los detalles, como todo el mundo lo sabe, los que conducen a la virtud y a la felicidad, en tanto que las generalidades son intelectualmente consideradas como males necesarios.

Aldous Huxley

Toda revolución genera libertad y genera nuevas formas de dominación. Entonces, hay que consagrar la libertad para combatir esas formas de dominación que inevitablemente van acompañadas de una gran transformación social, del descenso de unos, del ascenso de otros.

Carlos Fuentes

Nuestra labor ha sido juntar estos fragmentos de la verdad que han estado esparcidos por largo tiempo y presentarlos al pueblo del Señor, no como nuevos, ni como nuestros, sino como del Señor. No debemos atribuirnos siquiera el haber hallado y puesto en orden nuevo estas gemas de la verdad.

Charles Taze Russell

Nietzsche no quiere discípulos.

Friedrich Nietzsche

La enfermedad es la mayor imperfección del hombre.

Georg Christoph Lichtenberg

Un gran sacrificio resulta fácil; los que resultan difíciles son los continuos pequeños sacrificios.

Goethe

La mayoría de las personas prefieren confesar los pecados de los demás.

Graham Greene

Que yo también comparto los mismos miedos, también busco una cinta para atar el tiempo. También arrastro conmigo una cadena de sueños.

Ismael Serrano

Los mismos temas siempre vuelven a aparecer, volvemos a caer en los mismos temas una y otra vez. El autor está condenado a ello, es desesperante.

Jean Echenoz

Cada escritor crea a sus precursores.

Jorge Luis Borges

Cuanto más sola está una persona, más solitaria se vuelve. La soledad va creciendo a su alrededor, como el moho. Un escudo que inhibe aquello que podría destruirla, y que tanto desea. La soledad es acumulativa, se extiende y se perpetúa por sí sola. Una vez que ese moho se incrusta, cuesta una vida arrancarlo.

Juan Gómez-Jurado

No existe la casualidad, porque la casualidad es la providencia de los imbéciles, y y la justicia quiere que los imbéciles no tengan providencia.

León Bloy

El comienzo contiene ya oculto el final.

Martin Heidegger

La razón es la propiedad mejor repartida entre los hombres, pues ninguno reclama más cantidad de ella, porque todos creen tener la suficiente.

René Descartes

Cuando uno deja de crecer empieza a morir.

William Burroughs