Frase de Marqués de Sade

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Despreciad todas las leyes que os tiranizan; estas leyes son obra de vuestros enemigos, si no es que vosotros mismos las habéis hech... - Marqués de Sade

Despreciad todas las leyes que os tiranizan; estas leyes son obra de vuestros enemigos, si no es que vosotros mismos las habéis hecho.

Marqués de Sade

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Lo absurdo, bien presentado y lanzado audazmente, tiene a veces un extraño poder.

Anónimo

No puedo trabajar fuera debido a la intensidad de la luz.

Claude Monet

No pensaré mal de ti por contarme qué es psicológicamente lo que de verdad te ocurre. Sé que en el fondo de las cosas espirituales reina la oscuridad, y que en el fondo de las cosas físicas, la suciedad; pero pienso que es una cosa placentera para algunas pocas personas (y siempre las ha habido) el decirse entre sí tales cosas de un modo decente.

George Santayana

Me gustaría pensar que la canción de autor no es un género que privilegie la palabra por encima de la música. Creo que es más bien un equilibrio entre estas dos cosas.

Ismael Serrano

Los niños y los enanos han sido los mejores actores de mis películas.

Luis Buñuel

Cuando una persona entra en uno, se hace indispensable y no es fácil olvidarla.

Miguel Delibes

Yo no soy romántica ni cursi, eso es aburrido. Prefiero aventarme de un paracaídas que ver una película.

Miley Cyrus

Desengañada te crees y tus días son cuentos para niños.

Pablo de Rokha

El alimento de los poetas es amor y fama.

Percy Bysshe Shelley

Todo se ensalza: ciencia e industria, conocimiento y aplicación, descubrimiento y realización práctica que lleva a otras invenciones, trabajo mental y trabajo físico.

Piotr Kropotkin

El que llamas muerto, no murió, mas partió primero.

Séneca

Claro que pensaba que sí entraba el tiro. Si te parece empecé a pegar saltos de un lado para otro porque soy un retrasado mental.

Shaquille O'Neal

Lo que tú adquieres te pertenece y lo que te pertenece acaba siempre por volver a ti.

Stephen King

Era extraño que precisamente los ricos tuvieran tendencia a suicidarse, que fueran los primeros en caer en el hastío, la más terrible enfermedad que puede contraerse en la vida.

Thomas Bernhard

¿Qué hay en tu corazón? Me preguntó la vida. Era una pregunta tan brusca, buscaba tan poca excusa, que quise responder: ¡Nada! Pero el tiempo me dijo: ¡Mentiroso, ese lugar que en ti han ocupado las mujeres sólo en el infierno permanece vacío!

Vladimír Holan