Frase de Martin Amis

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La revolución egipcia es una maravilla. Me decía a mí mismo: esto va a ser terriblemente violento y fue magnífico.... - Martin Amis

La revolución egipcia es una maravilla. Me decía a mí mismo: esto va a ser terriblemente violento y fue magnífico.

Martin Amis

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Proteger el gusto es matar el arte.

Anónimo

Creo que hay algo en la naturaleza femenina que mueve al hombre a abandonarse ante ella, dejando que broten libremente sentimientos tiernos y emocionados, sin menoscabo de su hombría.

Bram Stoker

Este mundo, eternamente imperfecto, imagen, e imagen imperfecta, de una contradicción eterna.

Friedrich Nietzsche

Recuerdo haberle dicho alguna vez a Arthur Koestler que "la historia se detuvo en 1936", ante lo cual él asintió, comprendiendo inmediatamente.

George Orwell

Frente a tanto ministro pacifista que prefiere morir a matar, la decisión de matar a un enemigo que nos quiere matar está justificada como defensa legítima y si pudiera matar a quince miembros de Al Qaeda para liberar a los tres compatriotas secuestrados lo haría sin dudar.

Hermann Tertsch

Nada hay tan dulce como la patria y los padres propios, aunque uno tenga en tierra extraña y lejana la mansión más opulenta.

Homero

Mi meta fue entonces ser más inteligente, más capaz, más fuerte que los demás. Pero nadie me dijo nunca que el valor supremo de la vida no está en superar a los otros, en vencerlos, sino en amarlos.

José Ramón Ayllón

El secreto de la felicidad no está en hacer siempre lo que se quiere sino en querer siempre lo que se hace.

León Tolstói

Ni la vida, ni la libertad, ni la propiedad de ningún hombre está a salvo cuando el legislativo está reunido.

Mark Twain

La verdadera amistad ha de ser entre iguales.

Melchor de Santa Cruz

Obra de modo que merezcas a tu propio juicio y a juicio de los demás la eternidad, que te hagas insustituible, que no merezcas morir.

Miguel de Unamuno

Seré cremado. No quiero estar estancado en ninguna caja. Quizas me sepulten boca abajo y planten una semilla en mi culo.

Mike Dirnt

Después del Juicio Universal, Dios se reúne con Carlos Marx: ¡Ah, eres tú el que me dio todas estas preocupaciones en el siglo XX! Ya que siempre has dicho que yo no existo, serás condenado a hacerme de portero. Y cuando no quiero ser perturbado, estás autorizado a decir que Dios no existe, que Dios no está.

Roberto Benigni

He ido a la iglesia, vestido de luto, muy elegante y con una nueva peluca, he hecho un gran efecto.

Samuel Pepys

La vida es milicia.

Séneca