Frase de Paulo Coelho

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Basta con prestar atención; el aprendizaje siempre llega cuando estás preparado, y si estás atento a las señales, aprenderás siempre to... - Paulo Coelho

Basta con prestar atención; el aprendizaje siempre llega cuando estás preparado, y si estás atento a las señales, aprenderás siempre todo lo necesario para dar el siguiente paso.

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En el jardín de la Iglesia se cultivan: Las rosas de los mártires, los lirios de las vírgenes, las yedras de los casados, las violetas de las viudas.

Agustín de Hipona

Acreedor: Miembro de una tribu de salvajes que viven más allá del estrecho de las finanzas; son muy temidos por sus devastadoras incursiones.

Me siento más en casa que si viajo a París, por ejemplo, no soy nada patriotero, pero es que para mí, mi nación es mi lengua y mi cultura.

Arturo Pérez-Reverte

Para mucha gente el blues es algo sagrado y, cuando me encuentro con alguien que no lo entiende así, no descanso hasta convencerle.

Pájaros con muchas plumas no se pueden mantener; los escribanos con una mantienen moza y mujer.

Fernán Caballero

No soy monedita de oro para caerle bien a todos.

Se tiene la edad que se quiere tener, y también la edad del dinero que se tiene.

La vida, como un comentario de otra cosa que no alcanzamos, y que está ahí al alcance del salto que no damos.

Julio Cortázar

La voz es la flor de la belleza.

Michel de Montaigne

Todas las historias son ficciones. Lo que importa es en qué ficción crees.

Orson Scott Card

Los oprimidos han de ser el ejemplo de sí mismos, en la lucha por su redención.

El mar empapaba la roca a nuestros pies todo el día y continuaba arrancándole trozo tras trozo. Una noche tú soñaste que eras una sirena aferrada a un pilón de un muelle, y que intentabas arrancar los percebes con las manos. Deseábamos que nuestras dos almas pudieran regresar como gaviotas a la roca.

Me he subido a mi mesa para recordar que hay que mirar las cosas de un modo diferente. El mundo se ve distinto desde aquí arriba.

Me gusta pensar que cuando me equivoco no soy completamente yo, sino más bien ese animal no pensante que hay en mí. Así se puede ser más permisivo con uno mismo.

Si otros no hubiesen sido necios, nosotros lo seriamos.

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