Frase de Pierre-Augustin de Beaumarchais

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La política, la intriga. ¿Qué más da? Como me parecen algo hermanas, que las haga otro.... - Pierre-Augustin de Beaumarchais

La política, la intriga. ¿Qué más da? Como me parecen algo hermanas, que las haga otro.

Pierre-Augustin de Beaumarchais

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La capacidad de atención del hombre es limitada y debe ser constantemente espoleada por la provocación.

Albert Camus

Al principio creí que se había vuelto loco, pero al regresar a casa no encontré ninguna alteración en su conducta excepto la que se debía claramente al miedo de ser castigado.

Ambrose Bierce

No me gusta ir a un motel, prefiero casarme otra vez.

Annatell

Los amigos son como los taxis, cuando hay mal tiempo escasean.

Anónimo

Los niños escuchan con prevención y hostilidad los consejos de los maestros. En cambio, una palabra sensata, vertida por un compañero en medio de sus juegos, suele hallar eco en su alma.

Armando Palacio Valdés

¿Qué mero primate está tan condenadamente seguro de que puede conocer la mente de dios?

Christopher Eric Hitchens

Las dos más importantes palabras del idioma inglés son: cheque adjunto.

Dorothy Parker

La vida quizá es ese instante sin continuidad en que mis ojos se derrumban en los tuyos...

Forugh Farrojzad

Los que mas han amado hasta ahora al ser humano le han hecho siempre el máximo daño: han exigido de él lo imposible, como todos los amantes.

Friedrich Nietzsche

Nadie puede esconderse de Dios.

Jennifer Ehle

¿Quién no escribe para gustar a las mujeres?

Lord Byron

La prosperidad hace algunos amigos y muchos enemigos.

Luc de Clapiers

Y si nada hay prefijado de antemano, sino que el incierto azar lleva y trae a su antojo los destinos, si las cosas humanas están sujetas a infortunio, que al menos los decretos de la suerte nos hieran con golpe imprevisto.

Lucano

Ya que preguntas, para ahogar mis penas, me fui de putas la noche entera.

Roberto Iniesta

Sólo a aquellos que el destino ha golpeado, se les puede ayudar verdaderamente con el amor. Sólo ellos saben amar y ser amados como se debe amar: con gratitud y humildad.

Stefan Zweig