Frase de Reinhold Niebuhr

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Señor, dame la serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar, valor para cambiar las cosas que puedo y sabiduría para poder... - Reinhold Niebuhr

Señor, dame la serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar, valor para cambiar las cosas que puedo y sabiduría para poder diferenciarlas.

Reinhold Niebuhr

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Síganme, no los voy a defraudar.

Carlos Menem

¿Dónde imaginan a Evita, pidiendo no volver al pasado o al lado de las Madres y las Abuelas de Plaza de Mayo?

Cristina Fernández De Kirchner

Me enseñó que lo difícil es saber qué preguntas hacer, pero que una vez que lo haces, el resto es realmente fácil.

Elon Musk

No dimitas jamás. Es más cómodo ser pueblo que gobernante, marinero que capitán, enfermo que médico y niño que ama de cría.

Enrique Jardiel Poncela

Todos somos nada, porque la nada siempre estuvo y nunca lo estará.

Ernesto Sabato

No toméis afección jamás a una persona, toda persona es una prisión, un vínculo. No cobréis afección tampoco a la patria.

Friedrich Nietzsche

Si sólo se dieran limosnas por piedad, todos los mendigos hubieran ya muerto de hambre.

Friedrich Nietzsche

El arte es lo que resiste: resiste a la muerte, a la servidumbre, a la infamia, a la vergüenza.

Gilles Deleuze

Los descubrimientos de la ciencia moderna no invalidan en modo alguno las remotísimas tradiciones que atribuyen increíble antigüedad a la raza humana.

Helena Blavatsky

El hígado es la víctima de la envidia. No pocas veces lo es también el corazón.

Ignacio Manuel Altamirano

Nosotros estamos todos dañados en nuestro propio camino. nadie es perfecto. creo que estamos todos un poco chiflados. cada uno de nosotros.

Johnny Depp

La sinceridad es un don como los demás. No todo el que quiere es sincero.

Julien Green

Éste tenía la impresión de que su hermano había luchado con menos ahínco contra los deseos impuros, y había aceptado sus derrotas con espíritu más bien alegre. Pero lo importante era que ambos habían hecho las paces con las pasiones, el más encarnizado enemigo de la vida monástica.

Ken Follett

Dios, ¿qué es toda esa charla difundida por los papas? El paraíso está aquí, mi buen hombre. ¡Dios, no me des otro paraíso!

Nikos Kazantzakis

Todos matamos a aquellos que amamos. ¡Que todos lo sepan! Unos lo hacen con una mirada dura, otros pon una lisonjera palabra; el cobarde con un beso, el valiente con una espada.

Oscar Wilde