Frase de Théophile Gautier

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Para reducir lo infinito a lo finito, lo inasequible a lo humanamente real, no hay más que un camino: la concentración.... - Théophile Gautier

Para reducir lo infinito a lo finito, lo inasequible a lo humanamente real, no hay más que un camino: la concentración.

Théophile Gautier

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Explorar Frases

La memoria es la inteligencia de los tontos.

Albert Einstein

Son odiosos e ignorantes quienes aún niegan el Holocausto.

Barack Obama

La buena crianza nos exige que no hablemos a las personas de lo que no entienden, de lo que no les interesa; que no aburramos al prójimo con las preocupaciones de nuestro egoísmo haciéndole prestar atención a nuestras gracias, aventuras y milagros.

Clarín

El adjetivo es la cáscara de plátano de las partes del discurso.

Clifton Fadiman

El mundo es un rompecabezas cuyas piezas cada uno de nosotros arma de diferente manera.

David Viscott

Un día fuí un solitario extraño, Hoy soy el héroe de algunos.

Eyedea

No hay hombres cultos: hay hombres que se cultivan.

Ferdinand Foch

El humor hace reír y llorar sin perder su indiferente, nihilista relación con el mundo.

Leonid Andréiev

Un gran viento y repentinamente el estandarte se levanta.

Masaoka Shiki

Yo estaba intacto, no tenía ningún mal..., sin embargo algo no terminaba de cuadrar, como cuando el reloj de bolsillo funciona puntualmente y bien, sólo que a veces se produce un vacío en lugar de que haga tictac, esto es, en su mecanismo hay algo que se está descomoniendo...

Milán Füst

Un hombre puede cometer muchos errores pequeños. Y no tiene importancia. Pero si los errores son grandes y pesan sobre su vida, lo único que puede hacer es no tomarse en serio. Sólo así evita sufrir. El sufrimiento prolongado puede ser mortal.

Pedro Juan Gutiérrez

Si Tom te escribe espera al menos cuatro horas para responder.

Rebel Wilson

El sarcasmo es el lenguaje del diablo.

Thomas Carlyle

La civilización nunca alcanzará la perfección mientras la última piedra de la última iglesia no caiga sobre el último cura y la tierra quede libre de esa gentuza.

Umberto Eco

Una hora por la mañana antes del desayune vale por dos cualesquiera del resto del día.

William Hone