Frase de William Heinesen

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Soy la marea eterna de noche y día en tus ojos que la luz creó y que volvió a crear la luz y le dio contenido.... - William Heinesen

Soy la marea eterna de noche y día en tus ojos que la luz creó y que volvió a crear la luz y le dio contenido.

William Heinesen

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Las leyes no hacen buenas a las personas, sólo descubre a sus creadores y sus funestas intenciones por la que son creadas.

Alex Pimentel

Si quiero estar sola, en algún lugar puedo escribir, puedo leer, puede rezar, puedo llorar, puedo hacer lo que quiera - Voy al baño.

Alicia Keys

Me interesa la mujer. Además, la mujer es la que más lee. Mis protagonistas son siempre mujeres. A ellas las quiero más, las admiro más, y me hacen confidencias que no les hacen a otras mujeres.

Antonio Gala

Es necesario conceder a los hombres la libertad de juicio y gobernarlos de tal suerte que, aunque piensen abiertamente cosas distintintas y opuestas, vivan en paz.

Baruch Spinoza

La gloria es un veneno que pasa también a través del bronce de los corazones más equilibrados.

Enrique Lacordaire

Al oír un eco muchos creen que el sonido proviene de él.

Ernest Hemingway

El que cree en Mí aunque hubiera muerto vivirá: esta promesa deben conocerla todos, y somos los cristianos quienes debemos difundirla.

Francisco Fernández-Carvajal

La mejor venganza es el éxito masivo.

Frank Sinatra

Todavía existe el legendario héroe revolucionario que puede derrotar incluso a la televisión y a la prensa: su mundo es el de los países subdesarrollados.

Herbert Marcuse

La vida es corta y enojosa, transcurre deseando siempre.

Jean de la Bruyere

No debes temer que el aprendizaje se convierta en una parte de ti mismo, de modo que te resulte tan natural como respirar. Tienes que expandir tu mente lo suficiente como para que asimile todo.

Noah Gordon

Mi curva favorita es aquella en la que voy mas rápido que el resto de pilotos.

Pedro Martínez de la Rosa

No sé si de la vida en el abismo son en definitiva un jugo mismo el néctar y la hiel.

Rafael Núñez

El escultor no hace más que llamar, con el cincel y a golpe de martillo, a los guerreros que duermen en las espesuras del mármol.

Roberto Obregón

Aunque seas tan casto como el hielo y tan puro como la nieve, no escaparás a la calumnia.

William Shakespeare