El ayer terminó anoche. Hoy es un nuevo día.
Zig Ziglar
Enojarse es fácil, pero enojarse en la magnitud adecuada, con la persona adecuada, en el momento adecuado eso es cosa de sabios.
Aristóteles
Se os avisa para que os sometáis sin mayor dilación, pues enviaré a mi ejército a vuestras tierras y destruiré vuestras granjas, mataré a vuestra gente, y arrasaré vuestra ciudad.
Filipo II de Macedonia
La gran pregunta sigue siendo: ¿es esta la manera más rápida y útil de hacerlo?
Jakob Nielsen
Afirmar nietzscheanamente que no hay hechos, sino sólo interpretaciones implica algo fundamental: que quien habla desconoce los hechos.
Jesús G. Maestro
¿Quién dijo que hoy es múltiplo de antes, y el ego un envidioso malcriado...?
Joaquín Sabina
El loco (cuando mucho) tira piedras, pero el necio da con el mazo de apretar.
Joaquín Setantí
No temas el misterio, hazte su hijo predilecto: sabe que el mayor misterio, la raíz misma del enigma, es el motor inmóvil del universo, y a El sólo puede llegarse por la Sabiduría. La acción y la inacción; la bondad y la maldad; todos los distintos reinos de la naturaleza visible e invisible, no son más que campos de práctica, caminos largos o cortos que llevan inexorablemente a la sabiduría.
Jorge Ángel Livraga Rizzi
Los españoles tienen cierta inclinación al masoquismo histórico.
José María Aznar
El matrimonio es el máximo de soledad con la mínima privacidad.
Nelson Rodrigues
Y la soledad trae la amargura, de cara estirada, rectangular, con un raro mechón de cabellos sobre la frente.
Pablo Palacio
Puede que Cuenca no guste a las chicas, pero su trabajo es perfecto.
Pep Guardiola
... la posesión de las mujeres, los matrimonios y la procreación de los hijos deben, conforme al proverbio, ser todos comunes entre amigos en el mayor grado posible.
Platón
La virtud de un libro es que sea legible.
Ralph Waldo Emerson
Dios, que es acto puro y no tiene nada de potencialidad, tiene un poder activo infinito sobre las demás cosas.
Tomás de Aquino
Vale más morir de inanición que implorar una recompensa que se tiene ya merecida.
William Shakespeare
