Nunca le digas a un soldado que no sabe el coste de la guerra.
Alan Rickman
Si somos arrastrados a Cristo, creemos sin querer; se usa entonces la violencia, no la libertad.
Agustín de Hipona
La buena gente rara vez es plenamente reconocida durante su vida, y aquí, tenemos problemas graves de corrupción. Un día se dieron cuenta de que mis resultados deberían haber sido reconocidos.
Alice Stewart
Ni hay dulzura cual la muerte para el que la está llamando.
Alonso de Barros
Cometer un error y no corregirlo es otro error.
Confucio
Viajar es imprescindible y la sed de viaje, un síntoma neto de inteligencia.
Enrique Jardiel Poncela
La propaganda no engaña a la gente, sino que simplemente les ayuda a engañarse a sí mismos.
Eric Hoffer
Cuando el peligro parece ligero, deja de ser ligero.
Francis Bacon
El que en su obrar desluce Las glorias que le adquirieron sus mayores, de ellas es enemigo, no heredero; y de ellas es (pues le acusan) no poseedor, sino reo.
Francisco Bances Candamo
He leído en alguna parte que para amarse hay que tener principios semejantes, con gustos opuestos.
George Sand
Salvando tu alma, serás feliz para siempre; pero, si la pierdes, lo pierdes todo: alma, cuerpo, cielo, Dios, que es tu supremo fin... y esto, por toda la eternidad.
Juan Bosco
Para los historiadores, los príncipes y los generales son genios; para los soldados siempre son unos cobardes.
León Tolstói
El Tribunal Superior es más conocido por sus fallas que por sus fallos.
Luis Juez
Tengo miedo de perder con este apellido.
Michael B. Jordan
Un entendimiento todo lógica es como un cuchillo de hoja sola, que hiera la mano de su dueño.
Rabindranath Tagore
Sin un ánimo esforzado no se posee ninguna virtud ni se cumple ningún deber; aun para ser piadoso, es preciso no ser pusilánime.
Silvio Pellico
