Frase de Aristóteles Onassis

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Era como si le prestaran dinero a alguien que se proponía alquilarle una propiedad a Rockefeller. Que la casa tuviera agujeros e... - Aristóteles Onassis

Era como si le prestaran dinero a alguien que se proponía alquilarle una propiedad a Rockefeller. Que la casa tuviera agujeros en el techo no tenía importancia alguna, si Rockefeller consentía en alquilarla, con eso le bastaba al prestamista.

Aristóteles Onassis

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Las cejas de Hércules Poirot se alzaron cuando le presentaron la tarjeta del inspector Morton, de Berkshire. Hazle pasar, Jorge, hazle pasar, y trae... ¿Qué es lo que prefieren los policías? - Creo que cerveza, señor. - ¡Qué horrible! Pero muy británico. Trae cerveza.

Agatha Christie

Un ser autosuficiente es un ser aburrido.

Anna Quindlen

¡Pobre del amor a quien la fantasía abandona!

Arturo Graf

El talento es algo bastante corriente. No escasea la inteligencia, sino la constancia.

Doris Lessing

Según la ley, destruir la vida de un hombre es asesinato y, para mayor horror al mismo, los patíbulos tienden su mano abierta; por el contrario, quitar la vida de millares de gentes tiene un nombre especioso - arte glorioso de la guerra - y garantiza una famainmortal.

Edward Young

La primera vez que realmente sentí esto fue cuando estaba mirando canales y ví mi cara en cada canal. Que manera de enfermarte de ti mismo.

Eminem

Si nos salimos de los hechos, en política, nos perdemos sin retorno.

François-René de Chateaubriand

Ese concepto de las cosas me seducía: amores rápidos, violentos y pasajeros. A mi edad no seduce mucho la fidelidad. Sabía muy poco todavía del amor: citas, besos y hastíos.

Françoise Sagan

El hombre que se rinde a sí mismo es un miserable; el que labora para los demás, gozando y viviendo interiormente, ese es feliz.

Johann Gottfried Herder

Cuando todos te abandonan, Dios se queda contigo.

Mahatma Gandhi

Pero era en exceso prudente para revelar el motivo de sus recelos. Consideró que desenmascarar al impostor no sería cosa fácil, dado que la gente estaba tan predispuesta en su favor. Y como tenía muy pocos amigos, le parecía peligroso hacerse un enemigo tan poderoso.

Matthew Gregory Lewis

Los celos son, de todas las enfermedades del espíritu, aquella a la cual más cosas sirven de alimento y ninguna de remedio.

Michel de Montaigne

El beneficio que a todos se hace, a ninguno se hace.

Séneca

De entre las enfermedades de un Estado, consideraré por tanto, en primer lugar, aquellas que surgen de una institución imperfecta y que se asemejan a las enfermedades de un un cuerpo natural que proceden de una procreación defectuosa.

Thomas Hobbes

Todas sus lágrimas y sus promesas son una falsedad, pues la mujer solo se ama a si misma.

William Somerville