No todo error debe calificarse de necedad.
Cicerón
Cuando no existen leyes, el que manda no es más que un tirano, y los que obedecen no son otra cosa que esclavos.
Anatole France
Ellos querían gozar de lo prohibido. Querían elogiar la vida y no querían el dolor que es necesario para vivir, para sentir y para amar. Ellos querían sentir la inmortalidad aterradora.
Clarice Lispector
Acepta los riesgos, toda la vida no es sino una oportunidad. El hombre que llega más lejos es, generalmente, el que quiere y se atreve a serlo.
Dale Carnegie
El mar solo es el mar cuando se mueve. Las olas son lo que distingue al mar de un charco muy grande. El mar no es nada más que sus olas. Y todas las olas del mar terminan chocando con lo que ellas mismas empujan y rompiendo.
David Foster Wallace
Nunca agaches la cabeza, mira siempre bien alto ganes o pierdas.
Enzo Ferrari
Hay millones de facetas de la verdad, pero una sola verdad.
Hermann Hesse
La raíz zamorana, la raíz bolivariana y la raíz robinsoniana: tres raíces de un mismo tronco y un árbol enraizado en el pensamiento nacional; ideología que impulsa el nuevo y verdadero bolivarianismo.
Hugo Chávez
La primera de las ventajas de una intimidad antigua, consiste en que como ya se conocen los amigos, no encuentran placer en engañarse mutuamente.
Ignacio Ramírez
El amor es una barca con dos timones diferentes, y ha sido creado para ser llevado entre dos...
Naguib Mahfuz
Un poco de levadura ayuda a levantar la pasta.
Pablo de Tarso
No me interesa formar parte de la cultura dominante, pero eso no significa que sea anarquista. Me gusta que exista porque de lo contrario no sería divertido ir contra ella.
Rabih Alameddine
Hay unas beatas que rezan como los conejos comen hierba.
Ramón Gómez de la Serna
Nadie puede creer tan sinceramente en un error que lo repute como una verdad.
Robert G. Ingersoll
Un Estado constitucional es, en general, un hombre de opiniones comunes y habilidades poco frecuentes.
Walter Bagehot
La filosofía de las grúas, de las prendas y de las bombas está cerrada y es clara como el círculo y su circunferencia. ¿Acaso vuestra filosofía no se mueve también en círculos? La hermosura del mecanismo reside en su ritmo inalterable, concreto y exacto, idéntico al de un péndulo. ¿Acaso vosotros, que desde la primera infancia fuisteis educados según el sistema Taylor, no sois también tan exactos como un péndulo? Pero si todo esto es decisivo más decisivo todavía es lo siguiente: Los mecanismos no poseen fantasía.
Yevgueni Zamiatin
