Frase de Fernando Delgadillo

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Cuando al imbécil le mostraron la luna, solo supo ver el dedo de quien se la señaló. Yo no soy quién para subrayar que es cierto... - Fernando Delgadillo

Cuando al imbécil le mostraron la luna, solo supo ver el dedo de quien se la señaló. Yo no soy quién para subrayar que es cierto, pero quien dijo esto, lo dijo con la mejor intención.

Fernando Delgadillo

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Las personas son consumidoras de periodismo.

Andrew Vachss

No se debe ceder por cansancio a los importunos lo que, por razón, rehusaríamos a los que suplican.

Antoine François Rondelet

El creyente no puede concebir que alguien honradamente o en su sano juicio no lo sea. Quien disiente del nacionalismo ha de ser sin remedio un nacionalista español. Y casi nadie está dispuesto a sobrellevar este estigma. No ser nacionalista en España es casi peor que ser aguafiestas.

Antonio Muñoz Molina

Y me dirás: ¡busca!, reclinando la cabeza; y dedicaremos nuestro tiempo a encontrar ese animalito que viaja mucho.

Arthur Rimbaud

Sin ti las emociones de hoy sólo serían las envolturas muertas de las del ayer.

Artus de Penguern

El interés es la rueda principal de la máquina del mundo.

August von Kotzebue

Unos seres nacen para vivir, otros para trabajar, otros para mirar la vida.

Carmen Laforet

El peligro del pasado fue que hizo esclavos a los hombres. El peligro del futuro es que lleguen a ser robots.

Erich Fromm

Si vienen unos tres disparas al que tengas más cerca, si son cuatro o más, pues.

Javier Bardem

Las páginas amarillas de la memoria hay que alternarlas con hojas azules de futuro.

Lorenzo Silva

Si basta un solo cabello para atar mi voluntad, sin que haya necesidad de echarme cadena al cuello.

Luis de Góngora

Sería una torpe Iglesia del silencio la que callase por miedo a perder el último resto de sus antiguos privilegios, si callase por cobardía y falsa prudencia. Por fidelidad a Cristo, la Iglesia no puede callar. Una religión que no tenga la valentía de hablar a favor del hombre, tampoco tiene derecho a hablar a favor de Dios.

Luís Espinal Camps

El valor, lo mismo que las demás virtudes, tiene sus limites.

Michel de Montaigne

La prosperidad es un estado mental.

Raimon Samsó

Todo parece más encantador cuando lo vemos a distancia, y las cosas toman un relieve singular cuando se observan en la cámara oscura del recuerdo.

Théophile Gautier