Frase de Friedrich Nietzsche

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Lo esencial de la embriaguez es el sentimiento de fuerza y de plenitud. Bajo esta influencia nos abandonamos a las cosas y las o... - Friedrich Nietzsche

Lo esencial de la embriaguez es el sentimiento de fuerza y de plenitud. Bajo esta influencia nos abandonamos a las cosas y las obligamos a tomar algo de nosotros mismos.

Friedrich Nietzsche

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Si tú has sido hecho con un molde diferente al de la mayoría, no es mérito tuyo, la naturaleza lo hizo.

Charlotte Brontë

Sobre todo sé bueno: la bondad, más que ninguna otra cosa, es lo que mejor desarma a los hombres.

Enrique Lacordaire

¿Te imaginas quizá que llevo otra careta y que esto... esto... mi cara es una máscara?

Gastón Leroux

Mientras existan ríos y montañas, mientras queden hombres, vencido el agresor yanqui construiremos un Vietnam diez veces más hermoso.

Ho Chi Minh

El modelo por el cual debo vivir es no tener ningún modelo. Mi único hábito debiera ser no tener hábitos. Porque lo hice de este modo una vez es razón suficiente para no hacerlo así hoy.

Hugh Prather

Los líderes ya no surgen ahora los arman.

Jaime Garzón

¿ Serán que están tan hundidos que ya no necesita abogados, sino otra vez autodefensas?

Jaime Garzón

Si puedes imaginar un mundo de paz, sin confesiones religiosas- no sin religión pero sin este: mi Dios es más grande que tu Dios- entonces puede ser verdad.

John Lennon

Sabes que nuestros hijos ya lo saben, sabes que crecerán y subirán. Pero que sea al sol, que sea al sol y si es en el campo mejor.

Miguel Cantilo

Soy lo que es llamado aquí un ateo secular, excepto que ni siquiera puedo decir que soy un ateo porque no está del todo claro lo que se me pide negar.

Noam Chomsky

Prepárate para mañana trabajando bien hoy.

Norman Vincent Peale

Los hombres aspiran siempre al primer amor de las mujeres. Tal es su vanidad, poco exquisita por cierto. Nosotras, las mujeres, poseemos un instinto más sutil de la realidad. Lo que nosotras apetecemos es ser el último amor de un hombre.

Oscar Wilde

Soy el Rey de Roma y estoy por encima de la gramática.

Segismundo de Luxemburgo

Lo que de raíz se aprende nunca del todo se olvida.

Séneca

La alegría más grande es la inesperada.

Sófocles