Frase de Georg Christoph Lichtenberg

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Un libro es una especie de espejo, cuando un mono se mira en él, no descubre la imagen de un apostol.... - Georg Christoph Lichtenberg

Un libro es una especie de espejo, cuando un mono se mira en él, no descubre la imagen de un apostol.

Georg Christoph Lichtenberg

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Explorar Frases

La próxima guerra... bien puede enterrar para siempre la civilización occidental.

Aleksandr Solzhenitsyn

El único que necesita de verdad la piel de ocelote, es el propio ocelote.

Anónimo

Digamos ahora, exponiendo primeramente las dificultades que encierra, que no sólo es único el mundo, sino que es imposible que se formen varios, además de que es eterno, por ser indestructible e ingenerable.

Aristóteles

No dejes que la gente te trate mal.

Cuba Gooding Jr.

En Francia, en España, en todas partes, uno es una persona cuando tiene personalidad. Aquí -en Inglaterra- no se es persona mientras no se pierde la personalidad por entero.

Julio Camba

La limitación es esencial a la autoridad, pues un gobierno sólo es legítimo si está efectivamente limitado.

Lord Acton

El colegio donde me mandaron es un gran rollo mío, allí me enseñaron mucho, pero al mismo tiempo aprendí que la sociedad quiere que seas una marioneta: cuanto más famoso y mejor es el colegio, más marioneta vas a salir o, si no, más loco. Yo salí loco.

Luca Prodan

Comandante Manuel Antonio Noriega, líder latinoamericano e idolo de Panamá

Manuel Solís Palma

¡Buena almohada la duda para la cabeza bien equilibrada!

Michel de Montaigne

La lengua queda y los ojos listos.

Miguel de Cervantes

¿protestas como un ciudadano o callas como un súbdito?

Nach

Conciencia y cobardía son en realidad lo mismo.

Oscar Wilde

La brújula es una excelente metáfora física de los principios porque siempre señala el norte. La clave para mantener una elevada autoridad moral es seguir continuamente unos principios de verdadero norte.

Stephen Covey

El silencio de la pura inocencia trae a veces la convicción que no alcanza el raciocinio.

William Shakespeare

Antes, por cinco marcos, el mismo Freud te trataba. Por diez, te trataba y te planchaba los pantalones. Por quince marcos, Freud permitía que tú le tratarás a él y eso incluía una invitación a comer.

Woody Allen