Las palabras de aliento después de la censura son como el sol tras el aguacero.
Goethe
Acabar con la guerra mediante la palabra y buscar o mantener la paz con la paz y no con la guerra es un título de gloria mayor que matar a los hombres con la espada.
Agustín de Hipona
Lo que tenía que hacer era mantener la historia dentro de ciertos límites de lo que era, por supuesto, plausible.
Arthur Golden
Si alguna vez no te dan la sonrisa esperada, sé generoso y da la tuya. Porque nadie tiene tanta necesidad de una sonrisa, como aquel que no sabe sonreír a los demás.
Dalai Lama
Los grandes científicos son una raza rara, así que cuanto más se estudie ciencia, mayor será la probabilidad de encontrar a aquellos para los que se convierta en una vocación.
Eric Schmidt
He escrito sobre los niños, sobre mi país, sobre el continente, sobre los latinos, los viejos, la naturaleza, el maltrato de género. Le escribí hasta a una plaza y es una de las canciones que más orgullo me da. Todo que lo me rodea puede ser una canción. Ahora, cuándo la vas a escribir, no se sabe. Depende de lo que te va pasando en cada momento de tu vida. Las ideas están ahí y un día, afloran.
Fraco De Vita
Pocas mujeres hay cuyos méritos duren más que su belleza.
François de La Rochefoucauld
Creo que lo bonito esta en el interior y nunca envejece.
Françoise Sagan
La cólera de los imbéciles devasta hoy la tierra.
Georges Bernanos
Pedir que una poesía sea razonable es como esperar que una bestia sea razonable.
Giacomo Leopardi
Un hombre no debe creer en más cosas de las que puede digerir.
Henry Havelock Ellis
Grandes criminales serían los hombres si necesitasen de tantas leyes cuantas dictan.
Lord Charles John Darling
Si antes de besar a la persona amada habéis contemplado las estrellas, no la besaréis de la misma manera que si sólo habéis mirado las paredes de vuestra habitación.
Maurice Maeterlinck
Actualmente no existe ningún modelo de la teoría de la gravedad aparte de su expresión matemática.
Richard Feynman
La compasión y no la venganza es lo que guía mi flecha a su cabeza.
Suzanne Collins
En el medio del tímpano de la puerta, el reloj de arena parecía avisar a los visitantes de SantaMaría de la Oración y de la Muerte de la fugacidad del tiempo.
Vicente Garrido Genovés
