Cierto es que ya no recuerdo el rostro de Naoko. Conservo un decorado sin personajes.
Haruki Murakami
Casi no he tocado el barro y soy de barro.
Antonio Porchia
La más completa y feliz victoria es obligar al enemigo a conseguir lo que quiere sin sufrimiento alguno para nosotros.
Belisario Porras
Los dioses nos envidian porque cada instante nuestro podría ser el último.
Brad Pitt
Haz de ser más sabio que los demás, si puedes; pero no lo digas.
Felipe Stanhope de Chesterfield
No hay consecuencia, sino un elemento necesario de virtuosismo en el arte.
Franz Liszt
El poema está triste porque quiere ser el suyo.
John Ashbery
No sólo se adula a reyes y poderosos; también se adula al pueblo. Hay miserables afanes de popularidad, más denigrantes que el servilismo. Para obtener el favor cuantitativo de las turbas, puede mentírseles bajas alabanzas disfrazadas de ideal.
José Ingenieros
En el amor sobreviene un momento en que llega a su apogeo; en ese momento no tiene nada de reflexivo ni de sensual: es sólo pureza moral.
León Tolstói
Llamar a la puerta serviría de algo - siguió el lacayo sin escucharla -, si tuviéramos la puerta entre nosotros dos. Por ejemplo, si tú estuvieras dentro, podrías llamar, y yo podría abrir para que salieras, sabes.
Lewis Carroll
No está hecho para una relación prolongada. Es como los perros que persiguen coches. En realidad no les interesa el coche, sino que les gusta perseguir.
Lisa Kleypas
Si usted no es rico, debe ser útil.
Louis-Ferdinand Céline
El liderazgo eficiente requiere la habilidad de organizar y dominar detalles. Ningún líder genuino jamás está demasiado ocupado para hacer cualquier cosa, la cual pueda ser requerida en su capacidad de líder.
Napoleon Hill
Fácil opinar sobre algo sin tener ni idea, lo difícil es formarse y tener una opinión al menos seria y contrastada.
Pablo Hasél
La mejor forma de rehuir la responsabilidad consiste en decir: Tengo responsabilidades.
Richard Bach
Al igual que el tiempo, el espacio trae consigo el olvido; aunque lo hace desprendiendo a la persona humana de sus contingencias para transportarla a un estado de libertad originaria; incluso del pedante y el burgués hace, de un solo golpe, una especie de vagabundo.
Thomas Mann
