Frase de Jean Anouilh

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Todas las guerras son santas, os desafío a que encontréis un beligerante que no crea tener el cielo de su parte.... - Jean Anouilh

Todas las guerras son santas, os desafío a que encontréis un beligerante que no crea tener el cielo de su parte.

Jean Anouilh

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Explorar Frases

Es invierno y nieva.

Ana Botella

La mayoría de enfermedades; incluso aquellas que llevan al que las sufre a un especialista, son causadas únicamente por una serie prolongada y continuada de errores en la dieta y en el régimen.

Avicena

La sabiduría es mejor que la plata y el oro.

Bob Marley

Los críticos son como los eunucos en el harén: saben cómo se hace, lo ven todos los días, pero no saben cómo hacerlo.

Brendan Francis Behan

Los votos no deben contarse sino pesarse.

Carlos Abascal

Olvidas lo que quieres recordar y recuerdas lo que quieres olvidar.

Cormac McCarthy

..., y de la diferencia nace la discordia, y de la discordia viene el apartamiento de la unidad.

Erasmo de Róterdam

Escéptico es aquel que duda de todo, pero debería haber añadido, o que niega la realidad y la verdad de las cosas.

George Berkeley

La felicidad queda fatal en cámara. La tristeza y la soledad sí quedan bien.

Isabel Coixet

La sanción es parte de la formación.

Jorge González Moore

Si no hay la posibilidad de exponer una teoría, cállense o hagan la salvedad de que no la exponen íntegra, ni mucho menos, que omiten lo más esencial, pero ¿por qué entonces, presentando unos fragmentos, hablan a gritos de estrechez?

Lenin

Si hay violencia en nuestros corazones, es mejor ser violentos que ponernos el manto de la no violencia para encubrir la impotencia.

Mahatma Gandhi

Seré muy breve: Te he perdido y esto duele de Ocho y medio, Desaparezca aquí.

Nacho Vegas

Caballo viejo no puede perder la flor que le dan, porque después de esta vida no hay otra oportunidad.

Simón Díaz

A pesar del primitivismo físico y mental imperantes a la fuerza, en la vida del campo de concentración aún era posible desarrollar una profunda vida espiritual.

Viktor Frankl