Frase de John Berger

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El contraste entre la interpretación publicitaria del mundo y la situación real del mundo es tremendo, y a veces se pone brutalmente de... - John Berger

El contraste entre la interpretación publicitaria del mundo y la situación real del mundo es tremendo, y a veces se pone brutalmente de manifiesto en las revistas ilustradas de actualidad.

John Berger

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Explorar Frases

El maestro de la perfección es el error.

Alejandro Jodorowsky

Alma: ¿Dónde está el oro aquel que viste? Todo ha cambiado cuando estuvo enfrente; mis ojos tocan realidad tan triste que digo: es el presente.

Alfonsina Storni

A los buenos amigos no es suficiente iluminarles el camino, hay que apartar de él también todo lo que pueda hacerles tropezar.

Antonio de Guevara

Nunca te arrepientas de nada. Todo pasa por una razón.

Arcángel

Creo que la perfección perjudica al cine.

Jean Renoir

Tú no puedes ser lo que tú quieras. Pero puedes convertirte en todo lo que Dios quiere que seas.

Max Lucado

Cada edad tiene sus placeres, su razón y sus costumbres.

Nicolás Boileau

Las necesidades se convierten en deseos cuando se dirigen a objetos específicos que podrían satisfacerlas.

Philip Kotler

He comenzado muchas canciones en una servilleta, sentado frente a una taza de café.

Ricardo Arjona

Hoy puede acontecer lo que puede acontecer cualquier día.

Séneca

Las esperanzas se encadenan.

Séneca

No te enojas con una cosa o una persona a menos que las ames.

Sinéad O'Connor

Yo admiro al hombre que puede sonreír ante los problemas, que puede sacar fuerza de la desgracia, y que en la reflexión crece en valentía. Es característico de las mentes pequeñas encogerse, pero aquél que es firme en su corazón, y cuya conciencia aprueba su conducta, persevera en sus principios hasta la muerte.

Thomas Paine

La armonía de los colores debe fundarse únicamente en el principio del contacto adecuado con el alma humana, es decir, en lo que llamaremos el principio de la necesidad interior.

Vasili Kandinski

Quiero amor o la muerte, quiero morir del todo, quiero ser tú, tu sangre, esa larva rugiente que regando encerrada bellos miembros extremos siente así los hermosos límites de la vida.

Vicente Aleixandre