No he perdido ante la dificultad de los retos, sino contra el tiempo.
Leonardo da Vinci
Las comunicaciones entre el mundo espiritista y el corporal están en la naturaleza de las cosas, y no constituyen ningún hecho sobrenatural.
Allan Kardec
Desde que comenzó a hablar, el hombre no ha encontrado nada más grato que una amistad capaz de escucharlo con interés, ya sea para el dolor como para la dicha.
Augusto Monterroso
Tu esperanza más clara y más segura.
Federico Balart
Lo primero y lo último que se requiere del genio es el amor a la verdad.
Goethe
... cuando se me presentó el momento de tomar puesto en el Escalafón estaba ya convencido de mi poco amor al trabajo metódico y disciplinado de las oficinas, y renuncié a él para dedicarme a pensar en mis cosas; ya estaba poseído por la fiebre del inventor que había de padecer toda mi vida.
Leonardo Torres Quevedo
Cuando alguien no cree en su mañana, no tiene ninguna razón para tomar buenas decisiones en su presente.
Lucas Leys
No puede haber creencia sino donde hay concepción, pues la creencia consiste en admitir como verdad lo que se ha concebido y en creer que fuera del espíritu es tal como se ha concebido.
Maimónides
El único verdadero viaje de descubrimiento consiste no en buscar nuevos paisajes, sino en mirar con nuevos ojos.
Marcel Proust
Sólo su verdadero nombre hace reales a todos los seres y todas las cosas -dijo ella-. Un nombre falso lo convierte todo en irreal. Eso es lo que hace la mentira.
Michael Ende
Si no me quieres mami habla claro dale dilo.
Ñengo Flow
Para entrenarme siempre uso camiseta de universidades americanas por dos motivos: a los norteamericanos los quiero mucho y, además, yo soy doctor en la universidad de las piñas.
Oscar Bonavena
Desconfia de una mujer que dice su verdadera edad, una mujer asi es capaz de todo.
Oscar Wilde
Preguntarme qué es la transgresión es como preguntarle al campesino que es la pala.
Roberto Benigni
Cuando se ha perdido todo, cuando ya no se tiene esperanza, la vida es una calamidad y la muerte es un deber.
Voltaire
La India cree hoy, tan firmemente como siempre, en los dioses que por tan largo tiempo han contemplado con ecuanimidad su pobreza y desolación. Cuando algunas herejías o extraños dioses llegaban a ser peligrosamente populares, los brahmanes los toleraban y luego los absorbían en las vastas cavernas de la creencia hindú; un dios más o menos no mucha diferencia en la India.
Will Durant