Haga lo que hizo David. Vuélvase sordo a las viejas voces. Y abra los ojos a las nuevas opciones.
Max Lucado
Trabajar en el cine era vergonzoso, era lo más despreciable. Gracias a Dios se inventó la televisión.
Billy Wilder
El éxito es ese viejo trio: habilidad, oportunidad y valentía.
Charles Luckman
Los Dioses han existido siempre y nunca han nacido.
Cicerón
Sustituir el amor propio con el amor de los demás, es cambiar un insufrible tirano por un buen amigo.
Concepción Arenal
La autoridad no gana nada oprimiendo la libertad; ni la libertad tampoco debilitando la autoridad.
Émile de Girardin
Tú eres el bien, todo el bien, el sumo bien, Señor Dios vivo y verdadero.
Francisco de Asís
A comida escasa, buena bebida.
François Rabelais
No podría creer en un Dios al cual comprendiera.
Graham Greene
Ocúpate del alma, dijo el gordo vendedor de carne.
Joaquín Sabina
El mejor destino que hay es el de supervisor de nubes, acostado en una hamaca mirando y al cielo.
José Luis Rodríguez Zapatero
La economía no puede independizarse de la sociedad pues la consecuencia será la destrucción de la idea misma de sociedad y de bien común. El ideal a ser buscado es una economía de lo suficiente para toda la comunidad de vida.
Leonardo Boff
El poema es un objeto súbito. Los otros objetos ya existían.
Mário Quintana
Sólo se puede gobernar un pueblo ofreciéndole un porvenir. Un jefe es un vendedor de esperanzas.
Napoleón Bonaparte
El primer síntoma de que estamos matando nuestros sueños es la falta de tiempo.
Paulo Coelho
Trabajando fielmente ocho horas por día, puedes conseguir ser un jefe y trabajar doce horas por día.
Robert Frost
