Frase de Paulo Freire

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Realmente no hay por qué desesperarse si se tiene la conciencia exacta, crítica, de los problemas, de las dificultades y hasta de los p... - Paulo Freire

Realmente no hay por qué desesperarse si se tiene la conciencia exacta, crítica, de los problemas, de las dificultades y hasta de los peligros que se deben enfrentar.

Paulo Freire

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Una mentira no tendría sentido si la verdad no fuera percibida como peligrosa.

Alfred Adler

... la obsesión más antigua del hombre: la de ser amparado, la de adorar a algo superior, a alguien superior, que a él le conviene que exista para no quedar absolutamente solo...

Antonio Gala

Mi trabajo debería ser juzgado según como entra en los oidos y cabezas de los auditores, y no como describen los ojos de los lectores.

Arnold Schönberg

¿Serías tú, acaso, el primer prisionero devorado vivo por las sabandijas que infestan las celdas? ¡Delicioso banquete, no en el que comes, sino en el que eres comido!

Charles Maturin

El hombre se hace feminista cuando no sabe ya cómo agradar a las mujeres. La mujer se hace feminista cuando ya no sabe cómo agradar a los hombres.

Enrique Jardiel Poncela

Las computadoras de Minardi usan Windows 95

Esteban Tuero

No nos regocijamos con las guerras. Nos regocijamos cuando desarrollamos un nuevo tipo de algodón, o cuando las fresas florecen en Israel.

Golda Meir

Hoy me siento orgulloso al decir que soy inhumano que no pertenezca a los hombres ni a los gobiernos, que no tengo nada que ver con credos ni principios. No tengo nada que ver con la maquinaria crujiente de la humanidad: ¡pertenezco a la tierra!

Henry Miller

La juventud es la edad del crecimiento y del desarrollo, de la actividad, y de la viveza, de la imaginación y el ímpetu.

José Martí

Combatir por el bien no es combatir. Es dar.

José Narosky

Dejemos a los envidiosos la tarea de proferir injurias y a los necios la de contestarlas.

Louis Emmanuel Dupaty

El amor, cuando se hace público, aumenta de peso, se convierte en una carga.

Milan Kundera

La religión nunca debe olvidarse porque entonces los pecados perderían su gracia.

Reinaldo Arenas

Entre el yin y el yang, me quedo con el yen.

Roberto Fontanarrosa

Amad la justicia los que gobernaís la Tierra.

Salomón