Hay tres venenos primordiales: la pasión, la agresión y la ignorancia.
Pema Chödron
El odio es un borracho en el fondo de una taberna, que constantemente renueva su sed con la bebida.
Charles Baudelaire
Lo que quiero es que la gente llegue a su casa, se siente en su mesa, coma sus frijolitos, sus huevitos y que muy a gusto disfrute de la telenovela.
Eduardo Yáñez
Quizá nadie haya sido nunca bastante sincero para definir la sinceridad.
Friedrich Nietzsche
Verdaderamante, las chicas tienen no poco interés en que uno sea devoto y sencillo a la vieja usanza. Si a esto se allana, piensan ellas, también nos obedecerá de igual modo a nosotras.
Goethe
Todo tiene su molde. El pensamiento también. Pero así como no hay que temer a los moldes, tampoco hay que tener miedo de romperlos. Eso es lo esencial para poder ser libres: sentir respeto y aversión hacia los moldes.
Haruki Murakami
Los reyes son por instinto perfectamente corteses, pues sienten que sólo de esta manera pueden hacer soportable a otros su situación privilegiada.
Hermann Keyserling
Son sus costumbres, y hay que respetarlas.
José Luis Rodríguez Zapatero
Puesta del sol. La rana también llora.
Kobayashi Issa
La sangre sólo sirve para lavar las manos de la ambición.
Lord Byron
La naturaleza del universo, valiéndose de la sustancia del conjunto universal, como de una cera, modeló ahora un potro; después, lo fundió y se valió de su materia para formar un arbusto, a continuación un hombrecito, y más tarde otra cosa.
Marco Aurelio
Los errores en la política son crímenes; porque por culpa de ellos sufren millones de hombres sin culpa, por culpa de ellos se obstaculiza el desarrollo del país entero y, para décadas que vienen, su futuro.
Mihai Eminescu
Eres ceniza, fuego que apagado resurge de sí mismo enardecido. Eres misterio de lo conocido y libro abierto de lo inesperado.
Neftalí Beltrán
De todas las definiciones de Dios, ninguna es tan exacta como la expresión bíblica Yo soy el que soy, de Éxodo, capítulo 3.
Ramana Maharshi
Digamos que mi pestilencia se debe a la sobredosis del tiempo; que me hace valorar mis arrugas como si las excavara yo mismo.
Raúl Campoy Guillén
Es el amor, no la razón, que es más fuerte que la muerte.
Thomas Mann
