Frase de Boris Vian

De repente, ante los viajeros, apareció una colina. El automóvil la abordó como una tromba. Llovía a cántaros. Los relámpagos enviscaban... - Boris Vian

De repente, ante los viajeros, apareció una colina. El automóvil la abordó como una tromba. Llovía a cántaros. Los relámpagos enviscaban el cielo con pegajosos resplandores. La colina, creciendo paulatinamente, se convirtió en montaña.

Boris Vian

Todas las frases de Boris Vian →

Explorar Frases