Frase de Eurípides

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Pero la felicidad es inconstante, y cuando la aflicción viene después de la dicha, la vida es intolerable al hombre.... - Eurípides

Pero la felicidad es inconstante, y cuando la aflicción viene después de la dicha, la vida es intolerable al hombre.

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Nadie se atreve a ofender de nuevo a quien perdona siempre.

Adolphe d'Houdetot

Ser uno, estar unidos es una gran cosa. Pero respetar los derechos de ser diferentes es incluso mejor.

Cada vez que salgo de mi casa, veo que la policía patrulla el barrio en plan redada. Siento lo poco que valgo.

Chadwick Boseman

Si hay una pared de concreto frente a ti, tienes que atravesar esa pared. No puedes rendirte. Y tienes que amar lo que estás haciendo o nunca serás bueno en ello.

Un necio y su dinero se ven enseguida separados.

George Buchanan

Los religiosos se han creído que ellos tienen, por mandato divino, el deber de censurar las distintas manifestaciones de la libertad de expresión y de pensamiento.

Ismael Leandry Vega

La envidia y los celos no son vicios ni virtudes, sino penas.

Hemos nacido sólo para consumir y consumir y cuando no podemos, cargamos con la frustración, la pobreza y hasta la automarginación y autoexclusión.

Como bien se ha dicho, la aprobación de la reforma constitucional que permite la reelección inmediata del Presidente cambia radicalmente el escenario político. Lo primero que hay que reconocer es que los contradictores de la reelección perdimos en franca lid. De nada sirve rasgarse las vestiduras, ni ponernos a llorar. En la democracia, como en la vida, hay que saber perder.

Juan Manuel Santos

La teoría general de los sistemas es una ciencia general de la totalidad, concepto tenido hasta hace poco por vago, nebuloso y semimetafísico.

Ludwig Von Bertalanffy

Las cadenas y los muros del hogar no se ven con claridad, son casi siempre invisibles, aunque no menos reales o insuperables.

Luis Rojas Marcos

No es un amante lo que la mujer quiere en el esposo, sino una persona que la trate bien, y con ello hay bastante.

Marqués de Sade

Si queremos comprender a una nación por su arte, estudiemos su arquitectura y su música.

La ociosidad es la madre de la filosofía.

El que sólo es sabio lleva una vida triste.

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